En 2017, mi amiga Nayeli Acevedo, me recomendó leer el libro, "Luna Roja", escrito por Miranda Gray.
En enero de 2018, mi amiga Nayeli me envía por Messenger el evento de formación como Moon Mother con Miranda Gray.
Aunque no sabía que era una "Moon Mother", me inscribí al Taller de Formación que impartía Miranda Gray porque deseaba conocerla y que firmara el libro que había comprado. En marzo de 2018, motivada por mi amiga, Elizabeth Sánchez, me inscribo en un Diplomado para formarme como Doula de Parto y Asesora en Lactancia Materna.
A partir de esas 2 formaciones, mi vida y la de mi familia empezó a cambiar. ¿Por qué? Porque empecé a vivir de acuerdo a mi Biología Femenina, lo que me condujo a realizar muchos cambios entorno a mi relación con mi ciclo menstrual.
Empecé a trabajar con diferentes herramientas para llevar el registro de mis cambios hormonales y la manera en que estos provocaban en mí, cambios físicos, mentales, emocionales, energéticos y sensoriales.
Todo esto me condujo a realizar cambios en mi alimentación, la organización de mis actividades laborales, horarios para ir a dormir y meditar, entre otros más.
Fue un proceso difícil y lleno de retos para mí, porque tenía que ponerme en primer lugar en mi lista de prioridades y a partir de la fase de mi ciclo menstrual en la que me encontraba, organizar mi día a día.
¿Se imaginan el reto que implicó realizar este cambio?
En muchas ocasiones quise tirar la toalla, lo confieso, porque realizar un cambio de hábitos no se lleva a cabo de la noche a la mañana, pero me agradezco por no haberme dado por vencida y por ponerme en pie cuando me caía.
¡No se imaginan cuántas veces inicié una y otra vez!
Uno de mis mantras predilectos fue: "Insistir, persistir, mas nunca desistir".
Mi motivación e inspiración en los cambios que he llevado a cabo han sido mis 2 hijas y en aquellos años, mi hija mayor estaba próxima a iniciar su ciclo menstrual.
Vivir de acuerdo a mi ciclo menstrual me ha permitido darme cuenta que era antinatural la manera en la que antes vivía.
Me ha permitido comprender porque sentía que nadaba en contra de la corriente y que llevaba al Mundo entero sobre mis hombros.
También me ha permitido observar las diferencias biológicas que tenemos con los hombres y que ellos, al igual que nosotros, tienen su propia Danza Cíclica Hormonal.
Me di cuenta que Miranda Gray tenía razón cuando nos decía en los talleres: mientras más vivas en conexión con tu femenino, mas espacio le brindarás a los hombres para que vivan de acuerdo a sus energías masculinas.
Hoy, a 4 años de aquel 2017 en el que leí por primera vez el libro "Luna Roja", escrito por Miranda Gray, puedo decirles que no extraño para nada la vida en desarmonía que tenía antes.
He aprendido que nos ofrecen grandes dones físicos, mentales, emocionales, energéticos y espirituales, las 4 fases de nuestro ciclo menstrual: Menstruación, PreOvulación, Ovulación y PreMenstrual.
Es como si habitaran dentro de nosotras 4 mujeres muy poderosas.
Descubrí que nuestra Fase Menstrual es nuestro descanso físico, biológico y que representa nuestro cuerpo espiritual.
|
Al vivir en conexión con mi Ciclo Menstrual, mi hija mayor también lo hace y, como Madre, agradezco profundamente que mi hija desde que llegó su primer gota de sangre hasta la fecha, tenga una relación gentil, respetuosa y amorosa con ella.
En lo personal, ha sido una experiencia preciosa en mi vida y continuaré viviendo de acuerdo a mis energías hormonales toda mi vida. Porque aunque dejemos de menstruar o no tengamos nuestro útero físico, la danza del estrógeno, progesterona y oxitocina sigue siendo parte de nuestro sistema endócrino.
Si les interesa hacerlo y no saben por donde iniciar, pueden contactarme: será un placer acompañarlos en su Danza Cíclica.
Estamos juntas en esto: recuérdenlo siempre!
Les comparto estas letras con mucho amor desde el día 10 de mi ciclo menstrual que representa a la fase de Ovulación.
¡Los abrazo con mucho amor!
Elke Dona-Dio
MM3 y Mentora en Danza Cíclica
* Foto de portada por Vlada Karpovich en Pexels